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sábado, 10 de enero de 2015

Basura en La Malinche

Subir la Malinche fue una de las primeras cosas que quise hacer al volver a México.

Para subir  La Malinche hay que llevar al menos un litro de agua y algo de comer. ¿Porqué esto se traduce en botellas PET, cáscaras de mandarina y envolturas de chocolate que como semillas de Hansel y Gretel marcan el camino desde los 3,100 metros sobre nivel del mar hasta la punta misma arriba de 4,400? No se trata de unas cuantas basuritas ocasionales. Es un camino continuo de desperdicios humanos. Es la acción repetida e imagino deliberada de la gran mayoría de los visitantes.

Hay incluso un punto, donde el sendero abandona el camino pavimentado, que ya de plano es un basurero al aire libre.


Foto: Benjamin Blonder

¿Porqué la gente tira basura así en La Malinche? Es una pregunta que me hice por primera vez hace 15 años, cuando subí por primera vez La Malinche en una excursión escolar del Instituto Oriente. Esa ves muchos de mis compañeros abandonaron sus botellas de agua vacías en los arenales. Hoy casi todo mundo parece seguir haciéndolo.

La Malinche es el mayor pulmón y fuente de agua de la ciudad de Puebla. Tiene bosques y ecosistemas alpinos que vieron pasar las glaciaciones del Pleistoceno sin extinguirse, como una isla en el cielo que navega segura por un mundo cambiante y hostil. La vista desde la cumbre la mayor joya de los paisajes del Valle de Puebla-Tlaxcala.



Decir que la culpa la tienen las autoridades por no pagar a alguien que la recoja o poner basureros es el colmo del cinismo y el absurdo. La culpa es nuestra por tirar la basura y por tolerarlo. Yo llevo 15 años tolerando esta basura. Recojo las botellas que quepan en mi mochila y las envolturas que llenen mis bolsillos, me quejo y me pongo triste, pero la tolero. A fuerza de costumbre tolero la basura en La Malinche así como pueden aguantarse atrocidades peores sin que cambie nada.

Se necesita un cambio cultural, un cambio de conducta. Sí. Pero si nos sentamos a esperar nuestras desafortunadas barrancas de oyamel se llenarán de PET y los niños seguirán subiendo el sendero a la cumbre con la certeza de que la basura es parte del paisaje.

Quizá debiéramos comenzar por subir nosotros, como sociedad civil de poblanos y tlaxcaltecas, a recoger con nuestras propias manos la basura de La Malinche. Que organizarlo sea un objetivo de este 2015.